domingo, 19 de agosto de 2012

01:11am

"No es que tuviera exactamente, un alma sensible, sino, por decirlo en terminos precisos, que estaba poseida por una sensibilidad de animos incontrolable, que exploto para siempre en quien sabe que momento de su vida secreta, vida de nada, tan pequeña como era y despues se le subio al corazon por vias invisibles, y a los ojos, y a las manos, y a todo, como una enfermedad, aunque una enfermedad no fuera, sino algo menos, si tiene un nombre debe ser ligerisimo, lo dices y ya a desaparecido" - OCEANO MAR- Alessandro Baricco

miércoles, 15 de agosto de 2012

La mitad de la cara le lloraba que porque había un depilador infectado arrancándole la ceja izquierda. Se lo había encontrado en la calle, quien sabe que pelos habrá conocido.

lunes, 6 de agosto de 2012

Humectante

Rie la noche y los paisajes de la mente alteran la resolución 400 pixeles por pulgada. Los dedos van hidratando los segundos que se chupa la piel crema humectante dove go fresh 400 mililitros y los pelitos del brazo se ponen felices.Hay tiempos en la esquina mirando el cielo. No sé de que billete provendrá el chocolate que me estoy comiendo, pero cuando las canciones suenan se proyecta en una pared imaginaria una serie de carnes con nombre, apellido y falda. Se cocina un conjuro de palabras altas listas para exhibirlas en las vitrinas del facebook y entonces subastar las memorias, los egos, los estados ficticios. Que como estoy? Como una crema de ahuyama tirada en la nevera, kilos de likes haciendo peso en la espalda, fotos chupadas por cables de datos negros y en punta entrar en ese mundo de pixeles y dimensiones binarias que te editan la cara y el nombre a cada rato. El espíritu se hincha de figuraciones, tan mañana voy a llamarte french pudder percudido y con moñitos rojos te sé saltando afuera de la dicha y adentro te subrayaré el corazón cuando veas vibrar y cantar a la máquina extraña que sabe reproducir tu voz y contestar mis preguntas con una tecla. Luego volver aquí y levantar el polvo que aterriza en las cosas que hace tiempo no muevo. Esta vida me quiere dormida, abierta de piernas en los trenes de la ciudad, con tu cuerpo dosificado en las pestañas. Una humanidad de significados gritando en las cosas, mirando arriba con una sonrisa en el cuerpo, relajada escuchando el mar. Ando tan tarde de ti, tan sopa fría y no pasa el bus. Encuentras almohadas que no estan haciendo nada y trepan una pirámide perfecta, un diálogo columna espuma, un encaje vertebral que te alinea las ideas y el horizonte del ombligo, cubrelecho omnipotente, voy a meterte en la funda de animalitos para que abracemos el mar juntos historia invisible, nueve y cincuenta y cuatro, cinco minutos para llegar a ese punto de mapa literario que me encontrará en otro carnaval con el cuerpo descalzo, dedos dibujando ritos en la piel y en las teclas. Like. Mañana entrándose por la cortina morada, mesa llena de loza y mocos momificados, cama destendida, armario nadando por todo el cuarto, ropa libre, medias en la mesa, manchas en el techo cuadros de colores , bombillo durmiendo, aros en off, vasos con bordes usados. Porcelana inundada de labios, palabras y gripas de una semana, crema corporal hidratada y fresca destapada, dejando filtrar este mundo y mis sonidos, mis rutinas por ese huequito diminuto, ombligo de pepinos y te verde conteniendo la alarma activa a las 7:25 am y los picos de los pájaros cantando a las cinco y treinta de la mañana. Hay tantos lapsus de tiempo, afanes que no escribo ni escribiré, son cosas que se colan en el acto creativo, un rayo de sol en los ojos, una rasquiña en un cuerpo extraño del cuerpo, una canción qué sonó por casualidad, un dolor en los dedos y un pelo haciendote cosquillas en los ojos. Hay pestañas en curva, pestañas largas y sin shampoo. Está enferma la g del teclado, es blandita y dificil de agarrar, le gusta que la intenten más de dos veces, ya parece inclinada tan llena y misteriosa, palito en la mitad sin terminar, gato, al parecer tenía un mugre en el ojo, pero ya la sople y hg g g sin problemas, sin gripa, sin mocos, sin mi.

Campamento de las motas

Hay un cuágulo de motas acampando en la cima de la cobija verde. Hay un disco académico caminando por las geografías de la oreja, tiene voz de micrófono, de tarima, de domicilios privados a las dos de la mañana. Hay agua en el vaso, hay labios, hay sed.

Inés.. Tabilidad

Era como una almohada prostituta, un cuello abandonado en el chacra coronario de la silla. Ponque de cumpleañero en la huella digital de la cédula 1026569793. Cabeceo de puta, vagina roncadora, modo silencio activado. Pitos, ventanas abiertas, olvido del camino, del rumbo, del destino y la cita esperando en un café mi cara, mi voz, mis palabras, mi entrada imaginaria, las hierbas flotando en el café, en la lengua, pitillo juguetón, pato de dentista, son $200 más por el desechable. Le quedo grande al saco, tengo frío. Colonias de dedos invisibles viajando por los bolsillos de la ciudad, las vueltas, las bolsas, las barandas... me hace el favor y me timbra, por aquí por favor, bronceo de mugre. Felpa asquerosa, cuco de bus. Not smoking, vietato fumare, defense de fumer.